Este viernes 11 conmemoramos el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, impulsado por la Asamblea General de las Naciones Unidas sólo hace 6 años, con el fin de lograr el acceso y la participación plena y equitativa en la ciencia para las mujeres y las niñas, y además lograr la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres y las niñas.

La comunidad internacional ha hecho un gran esfuerzo para inspirar y promover la participación de las mujeres y niñas en la ciencia. Sin embargo, las mujeres siguen encontrando obstáculos para desenvolverse en el campo de la ciencia. La igualdad entre los géneros y el empoderamiento de las mujeres y las niñas contribuirán decisivamente no solo al desarrollo económico del mundo, sino también al progreso respecto de todos los objetivos y metas de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.

El 20 de diciembre de 2013, la Asamblea General de las Naciones Unidas reconoció que el acceso y la participación plenos y en condiciones de igualdad en la ciencia, la tecnología y la innovación para las mujeres y las niñas de todas las edades eran imprescindibles para lograr la igualdad entre los géneros y el empoderamiento de la mujer y la niña.

Hoy es un excelente día para reconocer y visibilizar el papel clave que desempeñamos las mujeres en la comunidad científica y la tecnología, creando así referentes femeninos para la infancia que puedan contribuir a la elección de estas áreas como carreras profesionales. 

Ya avanzando el siglo XXI, continúan existiendo prácticas que tienden a invisibilizar el aporte de las mujeres en distintos ámbitos profesionales y más aún en la ciencias. Apoyemos el fomento de prácticas que conduzcan a su eliminación y alcanzar la igualdad de género en el ámbito científico, reduciendo las brechas en oportunidades, salarios y reconocimientos. Lamentablemente, existen muchas historias donde las responsables de grandes descubrimientos científicos fueron timadas por hombres que robaron sus investigaciones y otras como Marie Curie que lo hicieron al alero de un hombre que le diera el paraguas necesario para demostrar su talento.

Somos complementarios, somos equipo, podemos crear e investigar en conjunto, elevando y aplaudiendo los logros vengan del género que vengan. Hoy quisiéramos inspirar a las niñas para que se interesen en la ciencia y no en los estereotipos, somos más que laboratorio, somos gestión, somos terrenos, somos difusión, indagación y experimentación. Esperamos que este 11F2022 ya haya nacido en Chile nuestra próxima nobel en Ciencias.