Cuando niños a muchos nos hablaron del cambio climático, que era algo que vendría si no hacíamos un cambio en nuestro estilo de vida. La mayoría fueron incrédulos, catalogando esos como pensamientos pesimistas y exagerados. Pues bien, el cambio climático es real y nos afecta directamente aquí y ahora.
Hoy vivimos en un mundo donde se producen tornados donde antes no existían, calores extremos en invierno y el mar sube su nivel e inunda poblaciones enteras. Hemos llegado a normalizar las marejadas en nuestras costas, entre otros fenómenos de la naturaleza. Así nos damos cuenta que el cambio climático se nos vino encima, sin tener claras las políticas a nivel global y local para frenar ese camino.
Los recursos naturales, la comida y energía están bajo una constante presión, sus precios aumentan y cada vez son más difíciles de conseguir. Los ecosistemas están disminuyendo, los bosques están dejando de ser pulmones vitales para la vida y el océano se convierte en un basurero.
Hemos sido nosotros los responsables de este cambio y justamente somos nosotros los llamados a detenerlo. Las naciones bajo el Pacto de París están tratando de bajar emisiones de carbono, reducir, reutilizar y reciclar los residuos, fomentar el uso eficiente de los recursos de agua, energía y materiales y promover la innovación verde. Se definieron así los Objetivos de Desarrollo Sustentables (ODS) que permiten acercarnos a las metas de reducción de la temperatura del planeta. Aquí es donde entendemos que todo el mundo tiene que hacer su parte: los gobiernos, el sector privado, la sociedad civil y personas como nosotros.
Así vamos formando ciudadanos responsables individualmente, que logra integrar la relevancia del reciclaje, el consumo sabio, la recompensa para aquellas empresas y pequeños emprendimientos que desarrollan sus productos con la misma responsabilidad y compromiso por los grandes temas mundiales.
Hoy urge trabajar unidos, colaborando desde la misma familia, entre vecinos, con las empresas, instituciones públicas y privadas sobre principios y valores, así como sobre una visión y unos objetivos compartidos que se centren primero en las personas y el planeta.
El cambio climático se nos vino encima, es innegable, por lo que es hora de actuar y rápido.